Y esto despierta gran curiosidad en ellos. Esto lo constatamos a través de la muestra que realizó el 1° básico B que se realizó en el patio de la sección respectiva. “Los niños trabajaron muy entusiasmados en este proyecto y esto tuvo un mayor realce porque también cooperaron sus padres y apoderados”, comentó a este medio informativo la profesora Marcela Moraga.

“Esta actividad pedagógica comenzó en la sala de clases del instituto y se trasladó también al hogar donde la familia se involucró en el proyecto ideado por cada alumno”, recalcó la maestra. De esa manera se articula esta asignatura que apunta a comprender el mundo artificial, los procesos productivos y el empleo de la tecnología en el mundo cotidiano que ellos observan en su entorno.

Ayuda, consecuentemente, también a resolver de manera creativa los problemas del entorno. Al hacer esto, pensar, se logra avanzar en procesos de desarrollo cognitivo de nivel superior.

Este proceso creativo ha sido permanente en la historia del hombre, desde que comenzó a fabricar los primeros y rudimentarios elementos de trabajo hechos con toscas rocas hace miles de años y que con el devenir del tiempo le han llevado a crear artefactos de alta tecnología para visitar y recorrer el cosmos.

El desarrollo de la ciencia y la tecnología han implicado cambios positivos y negativos en la vida humana: comenzar a pensar en ellos hace que los estudiantes del Instituto San Martín de Curicó desarrollen competencias que les preparen para vivir y mejorar nuestro planeta.

Texto y fotos:
Profesor Francisco Contreras Robles