El patio de enseñanza media inicial fue el escenario de la ceremonia de apertura de las clases la mañana del martes 1 de marzo. La ceremonia, muy significativa, recordó el propósito declarado del colegio cuyo foco formativo se centra en la persona y en su formación académica “uniendo fe, cultura y vida al trabajo cotidiano”, trabajo al cual todos están invitados a participar y construir.

TALENTOS

La bendición del año escolar estuvo en manos del equipo de pastoral. El Preámbulo motivador fue compartido por el profesor Michel Valderrama Zapata. A continuación se dio lectura al Evangelio según san Mateo (25, 14-25), “conocido como la parábola de los talentos”, leído por el profesor y vicerrector Jorge Muñoz Peña. El docente destacó que las personas han recibido talentos por gracia divina. Lo importante, subrayó, es tener “la capacidad, la autonomía y la valentía para poder desarrollarlos y a su vez multiplicarlos, no solo para uno mismo, sino que “también para los demás”.

El educador resaltó el regalo del reencuentro recordando que la historia de los Maristas nació como una pequeña comunidad de tres personas hace más de doscientos años, cuyos talentos al pasar de los años se multiplicaron para estar presentes en más de 85 países.

“No tengan miedo a construir sus sueños, no tengan miedo a soñar, no tengan miedo a crear. Obliguen a nosotros, los adultos, a acompañar los sueños de ustedes”, señaló. “Seamos felices construyendo felicidad, seamos felices construyendo nuestra identidad”, subrayando que la felicidad se consigue al ser protagonistas y constructores de la propia historia con todos los talentos que Dios ha otorgado a cada cual.

110 AÑOS EDUCANDO EN CURICÓ

El rector Andres Prado Soto, rector del colegio dio la bienvenida. Acotó, “hemos vivido casi dos años de pandemia que nos han mantenido alejados por muchos meses de vuestra presencia en el instituto”. Luego continuó: “Para nosotros los educadores, vivir la maravillosa experiencia de educar no estará plenamente logrado a través de las pantallas. Para llevar a cabo nuestra misión les necesitamos presencialmente puesto que el contacto día a día es para nosotros una motivación maravillosa que nos anima e impulsa a entregarles lo mejor desde nuestra vocación.

Asimismo, el rector recordó que este año el ISM ha cumplido 110 años en Curicó. Miles de estudiantes se han empapado de la educación marista haciendo “vida el sueño de nuestro fundador”.

“Nuevamente este año les recibimos con la alegría del reencuentro, con el gozo de ver en los rostros de nuestras alumnas y alumnos los cambios propios de la edad”, personas que crecen encaminadas a “hacer de su país y el mundo una sociedad más justa, solidaria y fraterna”, continuó.

Prado señaló que el colegio se ha preparado, tanto  en su infraestructura y equipos humanos para ofrecer lo mejor a cada estudiante que acoge indicando que también está en sus manos el sentido de pertenencia y su cuidado. “Ustedes reciben una educación privilegiada que pocos jóvenes de nuestro país son capaces de alcanzar”, reforzó.

AGRADECIMIENTO

El rector agradeció de manera expresa a los administrativos y, particularmente, a los auxiliares “por entregarnos cada año un colegio hermoso que dignifica nuestra labor educativa”. La comunidad tributó el cariñoso aplauso de reconocimiento. Por último, la autoridad presentó a los nuevos integrantes que se suman a la tarea educativa del colegio, lo cual fue recibido con gran beneplácito por la audiencia.

Una vez concluída la ceremonia, los estudiantes se reunieron con sus tutores (as) para recibir las primeras indicaciones  retirándose a las 11 de la mañana.