CURICÓ. El 1 de septiembre de 1962 comenzó esta historia. Los hermanos maristas del Instituto San Martín de esta ciudad, buscaban enriquecer su enseñanza a través de un grupo que representara la impronta materna de la Virgen María.

Esta última es la figura central de la congregación y para las alumnas y alumnos a partir de la enseñanza recibida. Nacen así las Damas Maristas, que ya llevan 58 años entregando su servicio y cariño de madre en este establecimiento educacional.

LABOR

En esencia, las Damas Maristas están a cargo de los kioskos del colegio donde las y los estudiantes adquieren alimentos especialmente en recreos, alimentos que hoy responden a una alimentación saludable. Asimismo, tienen a cargo el casino.

No tienen por supuesto fines de lucro y con los fondos logrados a través de su labor, pueden funcionar. Son 30 integrantes del grupo, dirigidas actualmente por su presidenta, Alejandra Ramírez Avendaño, quien con mucha amabilidad y simpatía conversó con nosotros para contarnos acerca de estas mamás del Instituto San Martín.

MISIÓN

Asesoradas por el rector del colegio, Andrés Prado Soto, trabajan en distintos turnos durante la semana para entregar su servicio, en los kioskos y casino y además cocinando para el grupo “Marcelino Ayuda”, que cumple una valiosa labor solidaria en Curicó.

El principal objetivo de las Damas Maristas es hacer presente dentro del colegio la presencia materna entre los alumnos y la comunidad general del establecimiento.

Su labor también se extiende a visitas que periódicamente realizan al Hogar de Cristo, San Vicente de Paul, Fundación Las Rosas y el Policlínico del Dolor de Curicó.

PRESENCIA

La directiva de las Damas Maristas está formada por: Alejandra Ramírez Avendaño, presidenta; María Astorga Cabello, vicepresidenta; Andrea Toledo Vidal, secretaria; Marcia Berríos Rivera, tesorera; Camila Salinas Covarrubias, pro secretaria y Macarena Cortés Bustamante, pro tesorera.

Especial mención merecen las madres voluntarias que llevan 30 años sirviendo a través de este grupo, aun cuando sus hijos egresaron hace mucho tiempo del colegio.

Ellas son Luisa Contalba Gutiérrez, Graciela Duarte González, Sara Hernández Cornejo y Rosa Torres Fuentes.

Gracias a la entrega de las Damas Maristas, las alumnas y alumnos pueden sentir la presencia de sus mamás a diario en el colegio, representado ello además en la esencia de la enseñanza marista, que es la figura de la Virgen María.