Los niños pertenecientes al preescolar marista de Curicó optimizan día a día, con la acertada guía de sus educadoras de párvulos y técnicos sus habilidades sociales y emocionales, enfrentan de mejor manera los desafíos que se les presentan, desarrollan su potencial intelectual; todo –siempre- impregnado con las características de un marco valórico característico de la educación que legara el fundador de la obra educativa: san Marcelino Champagnat.

Estos positivos antecedentes que aborda el Instituto San Martín son refrendados por María Victoria Peralta, experta en la educación de primera infancia que ha destacado: “La importancia de la educación parvularia es iniciar el camino de una formación humana integral -y por tanto trascendente- en una etapa de gran plasticidad y posibilidades en todos los planos: lo valórico, lo creativo, lo cognitivo, lo relacional, lo identitario, lo indagatorio, entre otros, a través de una pedagogía del amor, de la acogida, del descubrimiento y de las oportunidades”.

Merecida premiación a los preescolares del instituto sin soslayar que las familias –padres y apoderados –y las educadoras de párvulos son las piezas angulares en el contexto del éxito escolar de sus retoños.