Noticias
CUARESMA: LA LLAMADA AMISTOSA
Por
Angel Gutiérrez G.
Publicado:
9 Marzo 2014
Leido 418 veces
Tiempo de Cuaresma
Con la imposición de la ceniza, el miércoles pasado, iniciamos el tiempo saludable de la Cuaresma, tiempo fuerte de gracia y de salvación.
¿En qué está la fuerza de este tiempo? Yo diría que la Cuaresma es una preparación a fondo para la Pascua de Resurrección. Son unos ejercicios espirituales que te obligan a revisar tus actitudes, a orar, a escuchar la Palabra, a purificar intenciones, a cortar ataduras, a fijar los ojos en Jesús, para aprendértelo y para seguirlo de cerca.

La Cuaresma como el Adviento, te invita a la conversión, pero no simplemente por motivos éticos, sino porque el Señor quiere celebrar su Pascua contigo.

“Mira que estoy a la puerta y llamo” (Ap. 3,20).

Entre los distintos aspectos de este tiempo de Cuaresma, yo quiero destacar el de la llamada. Considero la Cuaresma como una insistente y amorosa llamada del Señor. También nosotros llamamos y clamamos, para que Dios nos oiga y nos favorezca: “Entre el atrio y el altar lloren los sacerdotes… diciendo: “Perdona, Señor, perdona a tu pueblo” (Jl 2,17). Y hasta nos quejamos que Dios no nos escucha. Hablamos de la sordera y silencio de Dios como de algo insoportable. Pues sigamos insistiendo y no dejemos de llamar a Dios en esta Cuaresma hasta que rompamos su sordera. Llamemos a Dios, pero no para que nos mande cosas, sino para que venga Él, que venga a nosotros, que no se aparte de nosotros, porque sin Él no podríamos vivir.

Pero en la Cuaresma no eres solo tú el que grita. Resulta que Dios también se pone a gritar. Él también nos llama, no deja de llamarnos por nuestro nombre, no deja de golpear a nuestra puerta, y resulta que no nos enteramos. Él sí que se puede quejar de nuestra sordera y de nuestra falta de respuesta. La Cuaresma es un tiempo en que Dios no deja de llamar. La palabra, los signos, los sacramentos, las celebraciones, toda la liturgia, es una continua llamada de Dios a nuestra puerta. Jesús está a la puerta de tu casa, como amigo y peregrino, esperando que le abras la puerta.

Cada día te dará un toque, una llamada de atención. Es para que no te olvides. “Tiene muchas maneras de llamar y hacerse presente: palabras, canciones, mensajes, sueños, golpes. Puede valerse de sus amigos y mensajeros, de una sorpresa, de una alegría, de un sufrimiento… “Él está ahí y se hace notar”.

Noticias Relacionadas
4º medio B vivió Jornada
Publicado: 17 Abril 2024 / 549 Lecturas
Eucaristía Natividad 2023
Publicado: 21 Diciembre 2023 / 680 Lecturas
Emotivo cierre del Mes de María
Publicado: 12 Diciembre 2023 / 717 Lecturas
© CONGREGACIÓN DE LOS HERMANOS MARISTAS
Ámbito de Diseño, Informática y Comunicaciones