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Olguita y Antonia: Misión Cumplida (Parte II)
Por
Francisco Contreras R.
Publicado:
19 Enero 2012
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Decíamos que desarrollar un trabajo bien hecho debe ser el norte común para todo educador. Claro, porque esta tarea se amplifica aún más por las implicancias que tiene dicha labor en innumerables niños y jóvenes a los que se atiende. Señalábamos también que, desarrollar esta obra durante largos años abocados en una única institución es aún más meritorio. Tanto para Olga Aliaga y Antonia Villanueva dichas facetas las cumplieron con creces aquí en el Instituto San Martín de Curicó.
Conocer sus historias – vislumbrar parte de sus vidas - junto a nosotros, y que concluyeron a fines del año 2011 cuando se acogieron a jubilación es tarea de estos artículos que hoy cerramos con:

Antonia Villanueva. De risa afable y de carácter cercano y amigable, Antonia traslada su recuerdo a un lejano año 1982 cuando era rector del ISM el Hermano Pablo Martínez (quien había sucedido al Hno. Pedro Marcos). Rememora anecdóticamente que había llegado recién a Curicó desde Santiago y estaba buscando matrícula para su hijo mayor sabiendo de la buena educación del instituto marista curicano. Como nueva vecina en esta tierra comenzó también su búsqueda para ejercer como profesora teniendo en vista el Liceo de Niñas Fernando Lazcano o el Liceo de Hombres Luis Cruz Martínez. Cuando el Hermano Pablo la entrevistó, como requisito recurrente previo a la matrícula de su hijo, se enteró que Antonia era profesora de historia titulada en la Universidad Católica, perfil personal y profesional que importó al rector de la época.

Ingresó hace ya treinta años con veinte horas en enseñanza básica. Aún agradece el impulso que le dio su marido para especializarse en Orientación Educacional: "siempre me gustó e inclusive me interesaba muchísimo estudiar sicología", confesó a este medio. De ese modo aceptó el desafío de estudiar por las noches en la Universidad Católica en la ciudad de Curicó durante la noche. Al paso del Hermano Pablo le sucedieron los Hermanos Ángel , Santiago y es el Hermano Jovino Morala quien la llevó a asumir nuevas tareas y responsabilidades asociadas a este incipiente ámbito del acompañamiento de los estudiantes maristas de nuestra ciudad y que gradualmente se inició con la implementación de los nuevos libros de Tutoría que comenzaban a editarse bajo el alero marista en Chile.

Luego, "con la llegada del rector Claudio Castillo asumí la orientación de un ciclo (Nm1 y Nm2) y compartiendo ese tiempo con el profesor Óscar Pérez (a cargo de la orientación de Nm3 y Nm4) y la psicopedagoga Angélica Valdés a cargo de la enseñanza básica". De esa manera se articula un incipiente Departamento de Orientación asumiendo como Coordinadora del mismo (bajo la rectoría de la Profesora Marcela Hormazábal ) hace unos 3 años atrás. Expresó a este medio informativo que " creo que hemos hecho un gran avance en esta materia aunque pareciera que no se hace mucho. Esto porque nuestra tarea es más silenciosa y de trabajo directo para apoyar a niños y jóvenes junto a sus familias". Posteriormente agregó que " poco a poco se fue construyendo este departamento con el apoyo incondicional y trabajo conjunto de los profesores y, particularmente, los tutores."

Añadió que "uno de estos logros fue consolidar un equipo de trabajo que se apoyó en dichos profesores-tutores,  orientador Waldo Maldonado, psicólogos Magdalena Rahmer y al que se ha sumado Felipe Moreno quienes pudieron organizar y presentar , como ejemplo, un total de 12 charlas vocacionales dirigidas a los IV medios". A reglón seguido continuó señalando que "se suman también las charlas dirigidas a los II medios sobre NEM, empleabilidad y vocación contándose el 2011 en dos oportunidades con la presencia de Raúl Cheix del CEIS Maristas de Santiago para conversar con los estudiantes de este nivel."

Manifestó que también se abordó un trabajo especial con los quintos, sextos y séptimos básicos con temas de gran importancia como la autoestima en la sala de clases. "Creo fehacientemente que la orientación ha ganado su espacio en nuestro colegio y, por supuesto, siempre hay mucho más por hacer; ha quedado un plan estratégico de trabajo delineado hasta el año 2015 y que servirá como hilo conductor de la Orientación del ISM, indicó.

Antonia es una enamorada de su labor y lo manifiesta con vehemencia cuando señaló que "aún queda como tarea mejorar e implementar mejores canales de comunicación con los apoderados y que se logre comprender que hay situaciones en los que se está citando a los padres y apoderados porque es necesario contar con su apoyo para ayudar a sus hijos e hijas quienes, muchas veces, no le cuentan a ellos sus problemas o las situaciones por las que pasan siendo necesario intervenir para apoyarles. La tarea de la Orientación merece ser comprendida en sus alcances: el apoderado debe escuchar y recibir la información que fluye desde el colegio en este ámbito. Generalmente los casos de Bulimia y Anorexia han sido detectados por el trabajo de la orientación del ISM porque ella entrega caminos, da perspectivas sobre qué hacer y, finalmente, la última palabra la tiene la propia familia, manifestó.

Planteó que al terminar su tarea en el ISM se lleva "gratos recuerdos y muy contenta del apoyo de mis profesores jefes; siento que he afiatado muy bien mi trabajo y lo siento en la relación que sostenemos a diario. Inclusive, en el trabajo intenso con los niños en la parte vocacional -que aún no se nota- porque es un quehacer desarrollado uno a uno que sutilmente se instala, que casi no se percibe porque no es un acto mediático en sí mismo."

Precisó que "no debemos olvidar que los niños y toda persona es diferente y esto que sabemos los profesores también han de recordarlo los padres porque no pueden estar estableciendo comparaciones que a la larga causan daño y despotencian la personalidad del niño y del adolescente. Las familias han cambiado mucho desde los tiempos en que llegué al colegio hasta nuestro presente, es parte de un fenómeno social y natural y que nuestro colegio no está exento de vivir", dijo.

Manifestó –finalmente- sentirse "agradecida de la experiencia marista percibiendo el haber cumplido plenamente una etapa en su vida y muy contenta de poder disfrutar  de su tiempo junto a sus hijos ( Juan Carlos, Viviana, Nicolás) y esposo, el Dr.Juan Carlos Tobar."

Fotografía: Francisco Contreras Robles
Twitter:@teachercon3ras

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